Las migrantes indocumentadas, olvidadas siempre, incluso por los colectivos feministas. A ellas este poema, en el Día Internacional de la Mujer y siempre.
Soy Ilka, dividida entre las fronteras de reminiscencias e imaginación, nadando en el mar bravío de la migración. Entre otras faenas, indocumentada con maestría en discriminación y racismo.